Y pensado que soy un Dios hago y
deshago lo que quiera porque no
hay nada ni nadie que me detenga,
porque no hay palabras mayores a
las mías, porque sigo siendo más
que un Dios, uno que ama, que llora,
que sufre y que sabe que es lo bueno
y que es lo malo.
Y pensando que soy un Dios no
Y pensando que soy un Dios no
me limito a nada porque soy más
que un Dios, uno sensible con
alas agujereadas para poder palpar
qué se siente ser un humano.
No hay comentarios:
Publicar un comentario